3/10/18

Ejercicios fáciles





Flexión y extensión: Cerrar las manos haciendo un puño y luego abrirlas muy lentamente, lo máximo que se pueda.

Movimientos circulares: Con un puño cerrado, trabajar mediante movimientos circulares para flexibilizar los músculos, los tendones y las articulaciones.

Estirar los dedos: Colocar el pulgar en la base del dedo meñique de la mano contraria y, presionando suavemente, estirarlo hacia atrás. Hacer lo mismo con todos los dedos de ambas manos.

Frotación: Frotar suavemente las dos manos unos segundos, como se hace al lavarlas, e ir aumentando la fuerza de frotación. Finalmente agitarlas con energía, concentrando la atención en la sensibilidad de los dedos.

Masajeo: Con una crema o aceite, a los que se les puede añadir unas gotas de árnica, o una crema específica reparadora, masajear cada centímetro de ambas manos con la yema de los dedos pulgares, primero de una mano y luego de la otra. Podemos variar la presión y la velocidad y entretenernos en puntos donde exista más tensión o incluso dolor.


No hay comentarios:

Publicar un comentario